¿Por qué las grandes compañías de distribución de agua (en Madrid Canal de Isabel II), de electricidad (Iberdrola, Unión-Fenosa), de telefonía o de cualquier otro servicio imprescindible para los ciudadanos, nos piden continuamente que ahorremos pero sus averías hacen tremendo gasto general y graves daños a los particulares?. Así, cuando se rompe una conducción del Canal por la vetustez de sus canalizaciones y se pierden millones de metros cúbicos, o cuando como hoy y todos los veranos estallan las subcentrales eléctricas y los barrios quedan sin luz, se estropea lo que hay en los congeladores y deben pararse las operaciones quirúrgicas, las líneas telefónicas no funcionan y nos quedamos desconectados y todo lo demás... ¿no deberían ser ellos quienes nos indemnizaran a los usuarios por su lamentable mantenimiento del servicio público que dan aunque sean entidades privadas?